¿Qué es el tratamiento con láser CO2?
El tratamiento con láser CO2 es un procedimiento de rejuvenecimiento facial que mejora la textura de la piel, elimina cicatrices y reduce arrugas. Utiliza un sistema de luz fraccionada para estimular la regeneración celular, promoviendo la producción de colágeno y elastina. Gracias a su capacidad para eliminar capas superficiales de piel dañada, consigue un efecto renovador que mejora la luminosidad y firmeza cutánea.
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¿Cómo es el tratamiento con láser CO2?
El láser CO2 actúa emitiendo pulsos de luz que generan un proceso de ablación controlada en la piel. Esta técnica permite eliminar células dañadas y estimular la regeneración natural de los tejidos. Antes de la sesión, se aplica una crema anestésica para minimizar molestias. Durante el procedimiento, el especialista ajusta la intensidad del láser según las necesidades del paciente.
¿En qué casos está indicado?
El láser CO2 está recomendado para tratar arrugas finas, cicatrices de acné, manchas solares y flacidez cutánea. También es eficaz para mejorar la apariencia de poros dilatados y eliminar irregularidades en la textura de la piel. Su capacidad de regeneración lo convierte en una opción ideal para quienes buscan una piel más lisa y uniforme sin recurrir a cirugías invasivas.
Beneficios del tratamiento
El tratamiento ofrece múltiples beneficios para la piel. Mejora la firmeza y elasticidad, atenúa arrugas y aporta luminosidad. Además, ayuda a reducir manchas y cicatrices, logrando una piel más uniforme. Su efecto estimulante sobre el colágeno permite que los resultados se prolonguen en el tiempo, ofreciendo una piel visiblemente rejuvenecida.
Recuperación
Tras la sesión, la piel puede presentar enrojecimiento e hinchazón leve durante los primeros días. Es fundamental aplicar crema hidratante y evitar la exposición solar directa para favorecer la cicatrización. En aproximadamente una semana, la piel empieza a regenerarse, mostrando un aspecto más firme, uniforme y rejuvenecido.